¿No sabes dónde puse mis anteojos?...
¡Me estoy últimamente distrayendo!...
¿Será por el embrujo de tus ojos
o acaso porque estoy envejeciendo?...
¿A ver, que te parece este poema?...
¿Has visto qué bonita está la tarde?...
¿Por qué será que todos mis esquemas
se rompen solamente con mirarte?...
Son muchos ya los aáos que toleras
mis horas de tristeza y de alegría...
la dura realidad y las quimeras
y un amplio repertorio de manías.
Convocas mis anhelos y mis versos,
mis gustos, mis amigos, mis ausencias
y tornas los momentos más adversos
en dicha, nada más con tu presencia.
Amor, mi gran amor,
mi buen amor, mi alero.
Amor, mi venturero amor,
maravilloso amor, te quiero.
Eres mucho más de lo que soy
y hacia donde voy, cuando me voy...
Amor, inalterable amor,
mi luminoso gran amor.