Tengo un vecino que no hace caso
A un perro que tiene fuera atado
Y yo lo miro desde mi casa
Y a mí me recuerda tanto
A la forma en que me tratas
Que no me quieres, pero me atas
Que la pelota no me la pasas
Que ya nunca me chocas la pata
Ni me acaricias la espalda
Ni me das premios ni nada
Suéltale
Que está cansado de llorarte cada noche
O déjale
Dormir por una vez al lado de tu cama
Que, yo ya sé, que me ha tocao vivir
Una vida de perro como a un hijo de perra más
Y cada día que va pasando
El perro sigue ahí fuera atado
Y yo lo miro desde mi casa
Y a mí me recuerda tanto
A la forma en que me tratas
Que no me quieres, pero me atas
Que al cuenco ya no le queda agua
Y que la cola no se me mueve
Ni siquiera cuando vienes
Te hago fiestas cuando vuelves
Suéltale
Que está cansado de llorarte cada noche
O déjale
Dormir por una vez al lado de tu cama
Que yo ya sé, que me ha tocao vivir
Una vida de perro como a un hijo de perra más