[ Featuring Resplandor ]
¿Entiendes ahora el sabor a hierro de nuestra sangre? Es real y nos reclama que volvamos a buscar en este mundo la salida hacia el real y que persigamos aromas, intuiciones y utopías todo el día. Que no nos mande el que vive del brillo en la espuma sin masa y que colguemos nuestra piel sin alma y, que caminemos desnudos con los desnudos, rebeldes con los rebeldes ahora con olor a gasolina... Esa mi amigo es nuestra vida, tu vida, gastándose segundo a segundo sin posibilidad alguna de reintegro total o parcial y eso solo te lo diré yo y nadie más en este mundo.
Ahora, yo cuento uno, yo cuento cero, ¡Despierta!