Fuimos a por un café, sin prisa.
Acabamos tú, la luna, yo y tu sonrisa.
Se notaba la tensión, enseguida.
Y como el hielo de tu café, me quede derretida.
Desvístete despacio y no te vayas.
Te abrazaré hasta la madrugada.
Fusionaré mis brazos con tu espalda.
No digas nada, que no hace falta.
Tú y yo somos habitantes de una cueva
Donde el secreto y la coraza no se dan la vuelta.
Y sólo existe el amor de madrugada,
Lo escondes todo con pasión, mordiscos sin palabras.
Sarcasmo, amor y humor, que curan las heridas.
Me da igual si vengo o voy, pues ya no me siento perdida.
(Na Na Na) No me hace falta nada.
Desvístete despacio y no te vayas.
Te abrazaré hasta la madrugada.
Fusionaré mis brazos con tu espalda.
No digas nada, que no hace falta.
Me da igual si vengo o voy, me da igual si vengo o voy.
Desvístete despacio y no te vayas.
Te abrazaré hasta la madrugada.
Fusionaré mis brazos con tu espalda.
No digas nada, que no hace falta.