Se cae el lápiz, el vaso y los papeles,
Se ven las luces, afuera los carteles, me duele
Que nada me consuele,
Que todo esto a pena sea lo único que huele
Que esta bestia me demuele y me flagele,
Que encuentre la manera de atravesar mis niveles
Y más la encierre, y más se cuele,
Va dentro de mi entraña y quiere que la excarcele
Y ya se que mataría y no me aliviará,
Y si ahora moriría nacería igual...
Llevo la bestia en mis oídos,
Guardo su furia en mis sentidos,
Ella es la fuerza con la que escribo.
Y aquí estamos, te puedo ver al fin, por nada del mundo, te dejaré de oír
Enciende mi fuego, que forma tendré así
Desde el silencio te puedo sentir
Y se que habitas conmigo esta soledad,
No voy a dejarte solo déjate abrazar
Un cazador un fugitivo, un reflejo un objetivo
Vos sos la fuerza por la que sigo...