Para que guardar adentro
Tanta locura escondida
Si se fue la que en el centro
De mi granja florecida
Me acompasaba la vida
Para que guardar adentro
Tanta locura escondida
Quiebra el ritmo, corazón
Que un tumulto de campanas
Rompa el concentrado son
De aquellas albas lejanas
De aquel toque de oración
Enloquece tus campanas, corazón
Que mi demencia embrujada
Salga al campo, quiero verla
Por el dolor desgreñada
Que no hay nada ya que me obligue
A esconderla del pudor de su mirada
Que aúlle el alma a la luna
Como el perro de la muerte
Y maldiga su fortuna cada una
De las lágrimas que vierte
Aúlle el alma a la luna
Como el perro de la muerte
Que escape al monte la fiera
Que su voz adormecía
Y que afuera la destroce en su carrera
El furor de la jauría
Ya se fue quien la tenía
Domeñada y prisionera
Que en la paz de mi clausura
Entre la nada la ráfaga impura
Que se da muerte a la razón
Sal de tu cárcel, locura
Quiebra el ritmo, corazón
¿Para que guardara en vano
Tanta demencia escondida
Si ya es vida la que al vaivén de su mano
Me acompasaba la vida?