Atrapada en un mundo equivocado con mil llagas en las manos
Luchando por vivir dentro del huracán que le atropella
Que le asfixia y que le atrapa, que tanto le hizo sufrir
Lo importante era, al fin, su manera de sentir
La esperanza le jugó malas pasadas
Devolviéndola en revancha el afecto que entregaba
Y aún el huracán le atormentaba
Esos sueños que anhelaba sentir como una flor
Donde no existe condena, si se trata de él o ella
El viento va, peinándote
Sé que es posible que esconda su amor bajo un rincón, sin dejarse ver
Si por un beso pones la vida, ¿qué importa tu sexo?
Si pones el alma en cada gesto de amor que le dabas
Como una flor sientes dolor al deshojarle el corazón
Sientes la espina que rompe tu llanto
Si por un beso pones la vida, ¿qué importa tu sexo?
Si pones el alma
Y hoy que vuelves la mirada a tu pasado
Y quizás emocionad te preguntas el por qué
¿Valió la pena acaso tanto esfuerzo
Soportando tempestades por sentir como una flor?
Donde no existe condena si se trata de él o ella
Y comprendes que la vida está de vuelta
Y sonríes con más fuerza contemplando esta vez
Que, en vez de un huracán, ya solo hay prisa
Peinarte no se fija si se trata de ella o él
Y ahora no existe condena y al final valió la pena
El viento va, peinándote
Sé que es posible que esconda su amor bajo un rincón, sin dejarse ver
Si por un beso pones la vida, ¿qué importa tu sexo?
Si pones el alma en cada gesto de amor que le dabas
Como una flor sientes dolor al deshojarle el corazón
Sientes la espina que rompe tu llanto
Si por un beso pones la vida, ¿qué importa tu sexo?
Si pones el alma en cada gesto de amor que le dabas
Como una flor