EN LA OSCURIDAD
Un suspiro es más que mil palabras
Voy avanzando y mis manos salen de mis manos.
Pongo los pies en el piso
Veo el horizonte curvado.
Siempre siútico de poca monta
Mi letras no son más que un montaje.
Que estamos sobrepoblados de lugares comunes
Y no nos gusta tanto el equipaje.
El gallo canta no sólo tres veces
Que los árboles se ven tan dañados,
Te desafío sur
A que me traigas lluvia por años
Que ya no tengo miedo
En ver las montañas
Sucumbir frente a sus aguas.
Todo es un gran ciclo
Como la vida en una cama
La oscuridad dice más de lo que se ve en la ventana
Las almohadas se vuelven planas
Y el café corre en mi venas empastadas.
O bien mi sangre es el café
Pero sólo en las mañanas.
Hay algo bajo la capa fría, dura,
Bajo la costra que cubre la piel
Sensible.
La sensación de ir despertando,
Que la costra se está soltando,
Que empieza a entrar el aire
La piel arde al contacto
NADA GRAVE.
Pongámosle huesos a estas carnes
Que sin huesos
Los hombros se vuelven retraídos
Cuando ya no quedan lágrimas
Que lloren el torrente de los vivos
Seres amigos o de los desconocidos
Mira al poniente y repite conmigo:
Tres veces te niego
Treintaitrés te envidio
Tres veces diluvio
Treintaitrés destruyo.