Lo primero que hizo Gardél en la ciudad de Nueva York
fué recortar una muáeca de satén
cuyas piernas lo hacian acordar a la Reina del Plata.
De millón de fotos que caben en la vida
la de Gardél mandando una postal de Wall Street
a los muchachos del Abasto,
es la foto más querida.
Lo primero que hizo Gardél en la ciudad de Nueva York
fué comprar un diccionario para ver
como se decia "mano a mano"
los otarios, las amigas y el gavión.
De millón de fotos que caben en la vida
la de Gardel buscando la cruz del Sur
en el cielo de los Estados Unidos
es la foto más querida.
Y lo último que hizo Gardél en la ciudad de Nueva
York
fué darse una biaba con Glostora,
sabiendo que pasaría mucho tiempo
antes de volver a oir a hablar de la gomina.