Bendito fondo oscuro
Bendito dolor del golpe
Benditos los renaceres
Que vienen después del susto.
Bendito el equívoco
De tu boca con la mía
Benditos los placeres
Secretos de mi vida.
Benditas las mañanas turbias
Que quitan el aliento,
Benditos los renaceres
Que huelen a nuevo puerto.
Benditas las cicatrices
Porque no sangra la herida
Bendito temblor del cuerpo
Cuando tus ojos me miran.
Y si he de morir temprano
Bendito que sea el viento
Que toque tu pensamiento
Como si fuera mi voz.
Y si la noche no alcanza
Y si duermo y me descuido
Bendita tu piel que salva
Y me recoge del camino.
Bendita incertidumbre,
Que genera movimiento
Benditos los renaceres
Después del cambio violento.
Y si al final sigue viva
La angustia de no encontrarte
Benditos ojos que arden
Buscando su propia luz.
Bendito fondo oscuro
Bendito dolor del cuerpo
Que convoca al movimiento
Que te hace caminar.