Todas las mañanas que viví todas las calles donde me escondí el encantamiento de un amor el sacrificio de mis mares los zapatos de charol. Los domingos en el club, salvo que Cristo sigue ahí en la cruz, las columnas de la catedral y en la tribuna gritan gol en lunes por la capital. Todos giran y giran todos bajo el sol, se proyecta la vida mariposa tecnicolor. Cada vez, que me miras, cada sensación se proyecta la vida mariposa tecnicolor Vi sus caras de resignación los vi felices llenos de dolor ellas cocinaban el arroz se levantaba sus principios de sutil emperador. Todo al fin se sucedió solo que el tiempo no nos esperó la melancolía de morir en este mundo y de vivir sin una estúpida razón. Yo te conozco de antes, desde antes del ayer yo te conozco de antes, cuando me fui no me aleje. Llegó la voz cantante llegó la luz del tren llegó un destino errante llevo tus marcas en mi piel y hoy solo te vuelvo a ver mariposa technicolor.