La luz descubre al alba la magia de un día más despertándome a tu lado. Tenerte así me salva de ese camino fugaz que se aleja en el pasado. Hemos vencido en las batallas de palabras amargas con las armas del amor. Hemos cruzado los desiertos de mil reproches muertos con el agua de nuestra esperanza... Juntos, entre tu y yo, de cal y arena entre los dos llenando nuestra luna nueva. Entre tu y yo, savia ligera, entre los dos naciendo cada primavera. Alumbra la mañana el mundo en la habitación y mi vida entre tus brazos. Tus ojos, mar en calma, son el agua en el que yo me desnudo en tu regazo. Hemos vencido en las batallas de palabras amargas con las armas del amor al amor, hemos cruzado los desiertos de mil reproches muertos con el agua de nuetra esperanza... Entre tu y yo, de cal y arena, entre los dos llenando nuestra luna nueva. Entre tu y yo, savia ligera, entre los dos, naciendo cada primavera...