Al compás dormilón de nuestro tango,
con mi brazo ciáiendo tu cintura,
murmurando mil frases de cariáo,
entreviendo mil cielos de ventura.
Yo quisiera saber si hay en tu pecho,
todavía, esperanza para mí,
si la ausencia y la distancia no han borrado
el amor que yo en tus ojos entreví.
Dime mi amor,
dime mi amor
si aún me quieres;
si la ausencia no mató tu querer,
si hoy, como ayer,
puedo creer...
Dime mi amor,
dime mi amor
si aún prefieres
mi corazón
que hoy para ti
pongo en mi triste canción.
Al compás dormilón de nuestro tango,
con mi brazo ciáiendo tu cintura,
murmurando mil frases de cariáo,
entreviendo mil cielos de ventura.
Yo quisiera saber si hay en tu pecho
todavía esperanza para mí,
si la ausencia y la distancia no han borrado
el amor que yo en tus ojos entreví.