Payador sin igual fue Gabino,
ruiseáor que cantó el arrabal.
Un lamento del suelo argentino
fue su dulce canción musical.
Payador de otros tiempos, genuino
y admirable cantor nacional,
que arrancaba el arpegio divino
de su viola de sentimental.
¿Qué querrán esos gatos de ahora,
payadores sin inspiración,
que en lugar de criollismos emplean
en sus versos caló de prisión?
¿Cómo van a embaucar a una mina,
payadores a la "rococó",
con el mate empastao de gomina
y anhelando una "pris" de cocó?
No cantó pa' los discos Gabino,
por la radio su voz nadie oyó,
pero en cambio su lírico trino
en el alma del pueblo vibró.
Payador de otros tiempos, genuino
y admirable cantor nacional,
encordó Santos Vega, el divino,
su guitarra de sentimental.