Siete puertas la rodean
Ciudad de muchas promesas
Sus calles de oro recorrí
Entre mística y belleza
Un atardecer me envolvió
De verdades y misterios
Del aroma a mirra me enamoré
Entre tantos otros recuerdos
La caída del sol fue la mejor
Tierra Santa me abrazó
De regalos no me puedo quejar
Si su esencia pude respirar
Era el sonido de el shofar
En la puerta de Damasco
Se veía la gente pasar
Por la puerta de Damasco
Entre mis manos un papel
Por la Vía Dolorosa
Bajo sus velos las oraciones
Bajo el mío peticiones
Y vi la Tierra Santa brillar en la noche
Sentí el frío en el Monte de los Olivos
Testigo fui de su resplandor
La caída del sol fue la mejor
Tierra Santa me abrazó
De regalos no me puedo quejar
Si su esencia pude respirar