Recuerdo el día en que
Tú y yo nos entregamos piel con piel,
Tu temblabas, yo te abracé,
Tenías miedo, yo también.
Te avergonzaste y fue normal,
Te habían dicho que eso estaba mal.
Y nos quisimos sin pensar
Que un día todo iba a terminar, adios.
Yo te extraño tanto que
Francamente ya no sé qué hacer.
Pues me han contado que estás muy bien,
Que los muchachos mueren a tus pies.
Adios, adios, cuídate,
Recuerda que esto suele suceder.
Hoy ganas tú, mañana yo,
Así son las cosas del amor, adios.