La Ma-Madonna
Autor: Jesus Barreto
Dentro de un grupo de niños, siempre hay uno que se tuerce
Aunque sea en los apodos, al menos así parece.
Por ejemplo, al gordito le decían "Perolito"
Y a Ignacio, sin falta, siempre lo llamaban "Nacho"
Su hermano Felipe, le decían "Pipe"
Y a Ramón, por razones raras, le tocó ser "Chacón"
No olvidemos a Toñín, que de Antonio sacaron
Era un niño pequeño, pero el apodo le clavaron
Y claro, nunca falta un Jesús al que llamen "Chucho"
Aunque ese apodo siempre me pareció un poco mucho
Al hijo del polaco, que debía ser "Paco"
Le decían "Vicio", un apodo algo macabro
Pero entre todos ellos, había uno que destacaba
De finos modales y porte elegante que no se ocultaba
Era el más alto del grupo, y eso no es invento
Siempre caminaba con aires, como desafiando el viento
Un día, con la cara seria, nos soltó la gran pregunta:
"¿Por qué todos tienen apodo, menos yo en esta junta?"
Lo pensamos un rato, y le dimos la opción
Escoge tú tu nombre, es tu decisión
Y él, con aires alegres y sin pensarlo mucho
Nos dijo con sonrisa: "¡Ahí no lo sé, me escucho!
¿Qué tal si me llaman 'Madonna'?" soltó con desenfado
Y todos reímos... el destino estaba marcado.
Así nació una leyenda, así nació la broma,
Hasta el sol de hoy, seguimos llamándolo "La Ma-Madonna"
Él solo se lo buscó, ¡y así quedó sellado!
Entre risas y chistes, "Madonna" fue coronado
Y claro, nunca falta un Jesús al que llamen "Chucho"
Aunque ese apodo siempre me pareció un poco mucho
Al hijo del polaco, que debía ser "Paco"
Le decían "Vicio", un apodo algo macabro
Pero entre todos ellos, había uno que destacaba
De entre todos ellos, él eligió la corona,
Y así nació la leyenda del grupo: "La Madonna"