Y un día llegó el capitán quebrando el sueño
Y nuestras vidas plenas de paz
Viajes sin fin, lugares al azar
De noche fue el festín de los sin alma
De día fue el sufrir su impunidad
Caravanas de terror para esas manos
Que no saben más que arar el suelo erosionado
No sabían de metralla ni fusil
No sabían de encierros y dolor, encierros y dolor
Caravanas de terror para esas manos
Que no saben más que arar el suelo erosionado
No sabían de metralla ni fusil
No sabían de encierros y dolor, encierros y dolor
Y al fin llegó de nuevo el sol
Pero no entregó el calor de la justicia
Pero no entregó la luz de la verdad