Hoy no vivo, hoy solo existo
Ligera inconsciencia en mí
El bosque es un lejano destello de libertad
Mil veces vencerá el que no teme morir
Mis espinas clavan y en mi cabeza sangra luz
Observándote finjo digitar números sangrientos llenos de vacío
Con sonrisas de lluvia, volver a disfrutar lo simple
Volver a la niñez y caer del boldo al suelo
Y brotar del cuarzo y del fuego envejecido, nacer
Mil veces vencerá el que no teme morir
Mil veces vencerá el que no teme morir