(Milonga)
Suena el piano, piano sin él
nace en una mano Gardel
con él, sin él, hiel y miel.
Suena un son patético en do
soledad en tono menor.
Pudo no haber nacido en Bonn
hijo del alcohol y el dolor
bajó, león, al panteón.
Escribió para Napoleón
piano-forte en una pensión.
Poco supo del buen amor
buscó compaáera y halló
sólo alguna flor rococó.
Tuvo la bandera y honor
sólo su sordera lo amó.
Ni arte ni parte de emperador
piano a piano tachó a Napoleón,
lo vio, lo olvidó, en mi bemol.
Sórdido, patético y pensador
máscara en la borrasca de ser dolor.
(La puntuación es de Alfredo Zitarrosa)