Desvelada y el recuerdo palpitando.
Va rogando con desespero.
¿Cómo y a quién se le pide tanto esfuerzo? El de olvidar.
En su cama todo un lago de preguntas guardadas. Ya no niega el cansancio.
Hay noches .... Esas noches ... Largas noches ....
Su país y su piel son tan cercanos.
Deterioro infalible, innegable.
Son pesados los nombres que esa noche decidió no nombrar.
Pero, ¿quién engaña a un cuerpo? Siendo archivo, biblioteca de memorias. Colectando.
Hay noches... Qué noches... Esas noches...
Los gritos que expulsan el embalse, narran letargos,
Madrugadas de lucha.
Párpados rendidos
Cuelgan por un instante.