"¡Viva la muerte y muera la inteligencia!"
Gritó Astray con voz imponente"Venceréis, pero no convenceréis"
Responde Don Miguel, sereno, de frente
Bajo cielos grises en Salamanca
Millán proclama, su cuerpo roto
Su grito busca quebrar la calma
Pero el eco se desvanece en el lodo
No vencerás, no convencerás
La verdad no se doblega
La razón se queda
Mientras el grito se desvanece
Don Miguel, firme, no titubea"Venceréis sin razón", proclama
Porque el triunfo vacío se apaga
Y en la universidad, la verdad reclama
No vencerás, no convencerás
La verdad no se doblega
La razón se queda
Mientras el grito se desvanece
Profanáis este sagrado lugar
Donde la mente debe brillar
Pero os falta la luz
Y la imposición os ahoga sin cruz
No vencerás, no convencerás
La verdad no se doblega
La razón se queda
Y aún en el silencio, siempre vence