Más tiempo del que puedo llegar a contar
Flotando en el vacío
La inexistencia es más leve que la soledad
Del hastío nació la imprudencia
Deformar, la realidad
Con el fin de crear la ilusión de un final
Impregnar, de bello caos el hábitat
De aquello que existe por mi voluntad
En una esfera entre un millón
El mar se enfureció
Escupió mi terrible error
La autoconsciencia fue su perdición
Maldita la búsqueda de un propósito
Que heredará esta nueva creación
Sin fe, sin miedo
Podía haber llegado lejos
Cobarde es, el nuevo ser
Que escuda en su ignorancia el deseo
Existe un padre en el más allá
Existe una madre y nos ama
Búsqueda impropia de algo irreal
Accidente que niega su causa
Sin fe, sin credo
No habrá motivo de festejo
Someter, es nuestro deber
A todo libre pensamiento
Destapar, al animal
Que llevamos dentro desde que emergimos del mar
Despertad ya, no hay nada que venerar
No hay más dios que el que nace de la invención
La vida os dí y en lugar de existir
La malgastáis en perturbar mi paz
Algo en mí, florece al morir
Me desvanezco en el tiempo
Alma en un mantra imbuida al blandir
El puñal del eterno
Algo en mí, se niega a morir
Soy quien propagaba el fin
El ritual que consume mi carne
Ascenderá a un falso mártir
Deformar el tejido de lo real
Con el fin de alcanzar
El trono de la divinidad
Muestras de indiferencia y desprecio por igual
Con este conocimiento la trascendencia finalizará
En un abrir y cerrar de ojos se expande la obra de nuestro creador
Nunca hizo nada de valor
Tan solo queda una puerta que cruzar
Erradicar al hacedor y ocupar su lugar
Flotando...
En el vacío...
La inexistencia es más leve que la soledad