Cuerdas que se rompen,
Barcos que se hunden
Luces que se apagan
Vidrios que se quiebran
Y todo es por vos...
Tu voz no me habla...
Me grita silencios
Mi alma pide imagenes blancas,
De seda
Y un abrazo al corazón
pero nadie se da cuenta
Todo acabará
Pronto...
Los candados se abrirán,
como azucenas.
Tu voz va a seguir muda
muda, nula, inerte.
y por fin me cubriré de blancura.
Pura, de seda,
como antes,
como siempre.
No me hablen de amor
justo hoy...