En tus ojos de noches agonizantes
En tus días simulados por la monotonía
No me vi desfallecer
Simple y sincillamente
Encontré que lo que había no bastaba
Sin preguntar continúe
Lento como gusano de maguey
El de la botella que bebía
Mezcal ardiente para la sangre
Tuve valor
Pero no la entereza de quedarme callado
Ahora no estoy
Me fui... Desaparecí
Y tú qué haces en medio de un bosque
Dónde las personas son árboles
Tan quietas, tan inmóviles
Pero con vida
La misma que quisiera de vuelta
Ahora no la tengo
Quisiera despertar por la mañana
Pero no puedo
Porque no fue lo que me trajo a ti
Si no lo que me llevo a caer
En un agujero sin fondo