SEÑORA
Señora que vives en mí,
Señora que estás
Iluminando mi camino.
Señora que vives en mí,
Señora que estás
Rogando por mi salvación
QUIERO DARTE, HOY, LAS GRACIAS,
ENTREGARTE MI TERNURA
Y LLENARME DE TU AMOR Y TU PAZ.
QUIERO, MADRE, ENTRE TUS BRAZOS
ARROBARME COMO UN NIÑO
Y VIVIR POR SIEMPRE CERCA DE TI.
Señora que vives en mí,
Oh Madre de Dios
Y Madre de todos los hombres.
Señora del cielo y del mar,
Estrella sin par,
Lucero de nuestra esperanza.
Señora que ves el dolor
Y sufres también
Por tantos hermanos que sufren.
Señora que enciendes en mí
El fuego que da
A mi vida tanta dulzura.