Amanece y en la ría
todo es del mismo color.
Negro muerte va tiáendo
en las frentes el sudor:
Desolación.
En el puerto las redes
se han quedado sin labor,
sin argumentos se ha quedado
en esos ojos la ilusión.
No me canso de soáar
que cuando salga el sol
la playa limpiará.
Y apago mi televisor
que de tanto dolor
no para de llorar.
Nunca máis, nunca máis, nunca máis.
A marea canalla dos piratas da mar.
Y los viejos del lugar
dicen que por aquí
había pasado ya.
Dicen que hoy lloraba el mar
lágrimas negras de soledad.