Fuego, llamas de miedo y azufre
Han estallado en tu radio,
Conduciendo hacia el futuro
Expandiéndose en el espacio.
Miradas que tienen perdido el corazón,
No, no te detengas que puede ser una bomba.
Pronto habrá llegado el día de la insolación
Y cuánto habrás pagado por el precio de tu sombra.
Nada, nada hay en lo que han dicho,
Ni por lo que se ha jurado,
Nada tuyo es el mundo,
Ese que te han diseñado.
Y estás viendo la nada, aunque todo esté ahí,
Y está siendo todo achatado contra el piso.
Cuál es el motivo y cuál la condición,
Por la que ha llegado ciudad futura su destino.
Llamas, fuego quemando banderas,
No hay dimensión del Estado
En un gran barril de serpientes
Las almas han envenenado.
Amor, aunque no haya nada para amar,
Ha desenterrado a tanto muerto del olvido
De las ciudades viejas han traído tanto mal
Tratados de codicia, futuro próximo destino.