Sur, sur, sur enamorado del viento. Sol, sal blanca novia del desierto
Sur, sur sobre los surcos abiertos, sur, sur, candentes brazos en cruz
A la huella, huella, sólo pampa y cielo, qué rumbo me has dado rosa de los vientos
Con su voz de siglos la tierra me llama, ya no importa nada ni siquiera el tiempo
Tropel de Pascual Arenal azota mis ancas la sed de llegar
La pampa perece vestida de mar al galope llanura y un solo final
Siguiendo El Dorado el hombre respira perfumes del campo
Pensando en la dicha sudores y sones, canciones y rezos
La pampa es la vida que cabe en un beso.