Ah, si pudiesemos contar,
las vueltas que da la vida,
para que se pueda encontrar un gran amor
Es como, si pudiesemos contar,
las estrellas en el cielo,
los granos de arena de ese mar, aun asi...
Pobre al corazón de los apasionados,
que cruzan el desierto en busca de un oasis en flor, arriesgando todo por solo un miraje,
pues cuan asi a una fuente oculta en las arenas
Bienaventurados, los que de ellas beben,
porque para siempre serán consolados
Tan sólo por amor, ponemos nuestras manos,
al fuego de la pasión,
dejándolos quemar, tan sólo por amor
Movemos tierra y cielos,
rasgando siete velos,
saltamos al abismo sin mirar atrás tan sólo por amor
¡la vida se rehace!
Tan sólo por amor, ponemos nuestras manos,
al fuego de la pasión,
dejándonos quemar,
tan sólo por amor...
la vida se rehace, la muerte ya no importa más...