Sin descubrir la verdad,
Sin muchas piezas, sin ley, sin cervezas, sin pan,
Sin ver las fantasías que se dan.
Sin preguntártelo a vos,
Sin darte prisa, sin luz, sin camisa, sin dios,
La historia no es la historia de los dos.
Como admitiendo el dolor,
Sin que le importe la risa, el deporte o la flor,
Sin trámites, sin dudas, sin pudor.
Desde jugar y perder,
Desde que llueve, y todos lo deben saber,
Desde que el humo es humo, desde ayer.
Siempre matando bien, como la soledad,
Dando vapor al tren, la vida va.
Sin afinar el do, sin encontrármela,
Sin que lo cante yo, la vida va.
Con una fuerza brutal,
Con explosivos, con ramos de olivo, con sal,
Con aire de que nada es esencial.
Sin una historia feliz,
Sin malpensantes, sin guion, sin amantes, sin bis,
Sin música de fondo, sin actriz.
Siempre matando bien, como la soledad,
Dando vapor al tren, la vida va.
Sin afinar el do, sin encontrármela,
Sin que lo cante yo, la vida va.