A Don Ata Por el camino del indio y el ánima de Don Ata en su alazán montado lo vio pasar la vidala el aire del cerro las flores del valle se le enredan en el alma ay ay ay a Don Ata. Una luna tucumana que alumbra piedra y camino y junto a la pobrecita lo lloran montes y ríos por Tafí Del Valle campos de acheral también por la Banda y Lules igual por Amaichá. La criollita santiagueáa para aliviarlo del frío le teje un poncho pampa al payador perseguido allá por Barrancas y por Salavina la humilde con la vidala le busca guarida. Ahí anda Don Atahualpa por los caminos del mundo por una copla por lanza marcando los cuatro rumbos que Dios lo bendiga lo tenga en la gloria por tantos recuerdos lindos y por su memoria. Un arriero solitario pasó por Altamirano con un silbo nostalgioso en busca de sus hermanos arriando sus penas por no encontrarlo se fue yendo despacito del pago entrerriano. Se viene aclarando el día por el Cerro Colorado y en las esquinas del churqui se estrella un rayo cortado despierta la aáera por la guichaqueáa San Francisco del Chaáar y también Santa Elena. Un aire de Buenos Aires le dio su canto de viento y se durmió en una huella en un estilo sin tiempo allá en Pergamino tal vez Santa Rosa lo llora toda La Pampa en una bordona.